Erigida a finales del siglo pasado sobre una inmensa laja del Parque El Zanjón, enseñoreada sobre la horizontalidad del Río, refuerza con su nuevo destino los valores tradicionales de su fama.
La Casa de Tejas se erige sobre una gran laja en el parque El Zanjón, un particular parque ubicado en el lado occidental del casco histórico de Ciudad Bolívar, con muchas lajas, arboles y pocas casas con una calle de piedra.
La casona se llama así porque cuando fue construida, a fines del siglo XIX, era la única casa de tejas en el área.
Desde la Casa de Tejas hay una de las vistas más espectaculares del río Orinoco, desde la ciudad.
Su construcción se debe al general Francisco Contasti, quien la tuvo como casa de habitación hasta la década de los 30 del siglo XX.
En los años 60 la Casa de Tejas se hizo muy popular, porque habitaba en ella Emilio Morales, el primer locutor profesional que tuvo la ciudad, el cual organizaba unas fiestas de carnaval muy recordadas por que incluían la elección de una reina gay.
En los 60 fue expropiada por la gobernación para convertir la zona en un parque, y a principios de los 90 el parque se hizo realidad.
En esa misma época, dentro del plan de revitalización del casco histórico, la Casa de Tejas fue recuperada y convertida en un centro de enseñanza y difusión de las artes plásticas, el teatro y la danza.